A. Órgano sensorial
La boca, órgano de la masticación, del gusto y también de la fonación.
B. Los músculos del grupo oral
- m. orbicular de la boca: cierra el orificio bucal y proyecta los labios hacia delante.
- m. elevador del labio superior: levanta el labio superior descubriendo el incisivo lateral.
- m. elevador del ángulo de la boca: levanta la esquina de la boca (sonreír en la esquina, reír).
- m. cigomático mayor: dilata la hendidura bucal (risas).
- m. cigomático menor: atrae el labio superior hacia arriba y hacia el exterior (gimotear).
- m. buccinador: volante hacia atrás el ángulo de la boca (soplar)[1].
- m. risorio: tira hacia atrás el ángulo de la boca (sonrisa).
- m. depresor el ángulo de la boca: tira hacia abajo la comisura labial.
- m. depresor del labio inferior: baja y propulsa el labio inferior (hacer la mueca).
- m. mentoniano: levanta la piel de la barbilla e, indirectamente, el labio inferior (rechinar).
- m. platisma: sube la piel del cuello y tira de la de la mandíbula hacia abajo (gritar).
C. Modiolo
Las fibras de los músculos peribucales se cruzan en un cruce fibroso situado justo fuera de la comisura labial.
D. Inervación sensitiva
La inervación sensible del estadio inferior está garantizada principalmente por el nervio mandibular (V3)[2].
E. Puntos de acupuntura
Punto central: Cheng Jiang[3], situado anatómicamente justo por encima del punto craneométrico Pogonion. Punto para afecciones bucales.
Punto lateral: Di Cang[4], correspondiente al modiolo del ángulo de la boca. No se aplica a todas las afecciones bucales, secuelas de parálisis facial o neuralgia trigeminal.
F. Zona refleja visceral
La zona perioral corresponde a los órganos digestivos y la zona mentoniana a los órganos genitourinarios.
G. Correspondencias psicológicas y emocionales
En morfosicología, un nivel inferior dominante caracteriza al tipo instintivo. Esta zona refleja nuestros apetitos materiales y nuestra capacidad de actuar concretamente sobre el medio ambiente.
Una fijación del m. orbicular de la boca muestra la reserva, el repliegue sobre sí mismo[5].
Una fijación del m. elevador del labio superior traduce la amargura, la ironía amarga.
Una fijación del m. elevador del ángulo de la boca manifiesta el orgullo, el desprecio, la burla.
Una fijación del m. cigomático mayor representa la alegría, el placer. Como es un estado emocional positivo, es raro encontrar una tensión anormal en este músculo, excepto en algunas personas con la sonrisa forzada (la sonrisa comercial) u obligada (risa amarilla[6]).
Una fijación del m. cigomático menor expresa el dolor (sollozar).
Los dos músculos cigomáticos están muy cercanos, pero manifiestan sentimientos opuestos, como «Juan que ríe y Juan que llora».
[1] el músculo del trompetista.
[2] La única rama del trigeminal que también asegura una inervación motora (músculos masticadores).
[3] «Depósito de líquidos», 24avo y último punto del meridiano Vaso Concepción, así llamado en referencia a su acción sobre la saliva.
[4] «Granero de la tierra», 4to punto del meridiano Estómago, así llamado en referencia a la boca que absorbe los alimentos.
[5] Si por ejemplo esta fijación se encuentra asociada a una tensión del m. corrugador de la ceja y del m. orbicular del ojo, esto revelará una ira entrometida, contenida.
[6] El origen de esta expresión se remonta a San Simeón, que en el siglo XVIII evocaba a los hepáticos tratando de parecer con buena cara a pesar de su enfermedad. Ellos se reían entonces de manera forzada, con su tez cerosa, por lo que «rieron amarillos».